101

Umm, se sentía cálido, se sentía suave y cómodo. Pocas veces se había sentido de esa forma, la verdad, tan pocas que podía contarlas con una mano y todas le eran muy familiares.

Ashary se removió ligeramente, haciendo un sonido de satisfacción con su garganta y se estremeció con una leve sonrisa, restregando su rostro en aquello duro, pero a la vez aterciopelado, que olía endemoniadamente bien. Era un olor familiar que le daba cosquillas en la nariz, fuerte, pero a la vez confortador. Quería dormir un poco más, pocas veces podía hacerlo sintiéndose tan cómodo, pero su reloj biológico estaba haciendo de las suyas y su mente ya se estaba activando a pesar de que sus muslos estaban entumecidos por el largo viaje y ¿Qué su cuerpo pesara tanto?

Frunció el ceño y fue abriendo ligeramente los ojos, encontrando que aquello en lo que restregaba su rostro no era precisamente su almohada, sino ¿piel? Pestañeó varias veces para salir del aturdimiento extraño en el que estaba, como si estuviese bo
Sigue leyendo este libro gratis
Escanea el código para descargar la APP
Explora y lee buenas novelas sin costo
Miles de novelas gratis en BueNovela. ¡Descarga y lee en cualquier momento!
Lee libros gratis en la app
Escanea el código para leer en la APP