38: Una fábrica de cachorros.
Dania.
No sé cómo se sentiría esta experiencia si fuera una mujer loba, pero no puedo dejar de repetir en mi mente lo maravilloso que ha sido. Soy la mujer más afortunada del mundo por haber sentido el verdadero amor corresponderme de la manera más pura, tras una conexión que va más allá de nuestros sexos, más allá de los sentimientos. Estar unida con Leander y con Near no solo se ha sentido demasiado placentero sino que demasiado profundo, como si hubieran tocado y activado algo en el fondo de mí que no sabía que existía.
Amor. Amor. Amor. No paro de besar a Leander en su mejilla y mi corazón se agita el doble, mis emociones se sienten al borde, porque aunque parezca mentira, puedo sentir mucho más, igual que ellos, y eso es algo que me cautiva. Siento lo mucho que me aman, que han disfrutado esto al igual que yo, y me siento completa, en sus brazos, con el cosquilleo de mi marca; aquello que me hace importante, orgullosa dueña por siempre de ambos.
Mis manos van a su abdomen dibujand