¿ Qué creen que va a pasar ahora con estos dos? Fin del Maratón!! Si veo que comentan y dejan reseña, en la noche les doy uno más.
Jayden BowenMi madre está en la ciudad. Cuando recibí su mensaje durante la cena con Margot, anunciando que vendría a Londres, no pude hacer más que irme de inmediato diciéndole a la sexy y mentirosa mujer frente a mí que tenía una emergencia. Y es que eso no era una mentira. En absoluto.En otro momento, tal vez cuando seguía siendo un niño o incluso un adolecente, ese mensaje habría provocado una emoción positiva en mi, ahora mismo no es más que ansiedad y estrés. Muy lejos quedó la madre que recordaba de aquella casa adosada en la que jugábamos en el jardín junto a mi padre, no. En su lugar se convirtió en una criatura fría de la alta sociedad. Luego de la muerte de mi padre, mi madre cayó en depresión y había estado así por casi un año, hasta que poco a poco había empezado a levantarse, volver a trabajar, rehacer su vida. Y fue ahí donde llegó él: Lord Fitzpatrick. Sinceramente ni siquiera pensaba que alguien siguiera llamándose lord a sí mismo en pleno siglo XXI, pero lo último
Jayden Bowen— Dejame ver si entiendo— Dice Anthony, viendome con ojos entornados desde su lugar. Nada más haber salido del restaurante me encargué de llamar a las únicas dos personas que podían ayudarme a calmarme en estos momentos. Y aunque ninguno de los dos se ha dirigido más de dos palabras entre ellos, tanto Anthony como Dex están aquí para mi— ¿Tu madre te ha dado un ultimátum para que te cases con la sobrina de su esposo?Nada más escucharlo un gruñido sale de mis labios, opacado únicamente por el de Dex. No entiendo en qué momento mi vida pasó a convertirse en esta novela descabellada en la que mi madre es la villana de la historia. — Sobrina segunda. — Digo, nada más porque no tengo ningún otro comentario que hacer. — Y ya les dije que no pienso casarme con nadie.Dex, quien ha permanecido inusualmente callado, se pone de pie dando una breve mirada a Anthony y empieza a pasearse de un extremo a otro del salón. Eso no ayuda en nada con mi estrés.Estoy jodido. Lo sé. Pued
Margot30 de enero 2020Me separo de la computadora después de haber puesto el punto final y le doy una última leída a mi pequeño relato antes de decidir subirlo en el blog. Siempre he disfrutado leer. Ha sido en mi vida como un ancla terapéutica de la que me he vuelto dependiente. Hace seis meses que terminé la universidad y ahora cuento con un título profesional de periodista y un puesto asegurado en el periódico HoraenPunto, uno de los más influyentes del país y del cual es dueño mi padre. Sé que todo esto debería significar algo bueno en mi vida, pero lo cierto es que tarde me he dado cuenta que escribir noticias no es lo que realmente amo hacer. Me gusta, soy buena en ello, pero no lo amo. y eso mismo le dije a él.Las cosas no resultaron tan sencillas como esperaba, pues soy una recién graduada de 22 años que vive en un apartamento pagado por su padre, con una manutención también pagada por su padre, que acaba de rechazar el legado familiar. ¿Jodido verdad? Mi padre al ver q
03 de febrero 2020Se que ningun trabajo es deshonra, pero juro que no puedo esperar el día en que no tenga que ponerme este estúpido uniforme y servir mesas. Tengo el olor a grasa adherido a la nariz mientras llevo mi décima orden de hamburguesa doble con tocino del día. La gente que viene a este lugar es lo suficientemente joven o inconsciente para llenarse las arterias de grasa sin importarles morir de un infarto en el proceso. Antes de trabajar aquí yo amaba las hamburguesas, ahora solo verlas hace que quiera salir corriendo.Mi jefe me hace una seña para indicarme que me acerque. Dejo la orden frente al hombre inconsciente por su salud y me encamino al mostrador. Esta parte del día es la única que suele ser entretenida. Y eso es gracias a que Steven, mi jefe, es una cosa buena para ver. Y más que para ver, se ha vuelto en una cosa buena para probar. Podría considerarse que tiene el aspecto del típico inglés. Rubio, alto, piel de porcelana y ojos avellana, pero cuenta con el
Nunca debí haber dado ese like. Hacerlo ha sido como destapar una olla que estaba a punto de derramarse y eso me ha tenido con los nervios de punta. El miércoles pasado mientras seguíamos con nuestra “noche de películas” había estado dándole vueltas a lo que hice y me dije “no seas ridícula, solo fue un like entre los miles que recibe a diario. No lo va a notar” Y eso debía haber sido la razón ser. Porque vamos, ¿Qué posibilidades había que se fijara en mi like? Hoy tengo el almuerzo mensual en casa de mis padres y llevo toda la mañana estresada tratando de buscar no solo la ropa perfecta, sino también la historia perfecta para cuando pregunten -—Porque van a preguntar-— sobre cómo van mis intentos para ser escritora. Lo que se resume en que hoy he recibido un nuevo rechazo.Hago todo lo posible por relajarme y a las doce y treinta ya me encuentro lista para salir. Se que me van a hacer un interrogatorio en cuanto me vean, una parte de mi se emociona de verlos. Antes de todo est
MargotUn trato es un trato, eso es algo que en mi casa siempre se ha respetado. Sin embargo, mi abuela abre la boca dispuesta a disparar veneno otra vez, pero la mano levantada de mi padre le advierte que se calle. Ella murmura un insulto en árabe que consigue que se gane una mirada asesina de papá. Ella me da una última mirada de desaprobación antes de levantarme y salir de la sala. No quiero ni pensar en lo que debió decirme.Los ojos avellana de papá me miran cansados. Él estaba realmente emocionado con la idea de que trabajara en el periódico. Había estado acompañándolo al trabajo desde que era una niña y era todo lo que me veía haciendo cuando creciera; y así fue, hasta que en medio de la carrera empecé a escribir algo más que noticias y reportajes. Esa libertad que me da crear personajes ficticios, en mundos imaginarios, con aventuras extraordinarias, me hace sentir plena. Como si fuera algo que me ha estado esperando desde siempre. El periódico sigue siendo algo que me gusta
Margot Oficialmente debo decir que estoy siendo una acosadora. Ahora que he renunciado al restaurante y aún no debo ir al periódico porque no me han hecho el ingreso, he pasado los últimos dos días espiando la cuenta de i*******m de Jayden Bowen y su canal JayReed. Debo admitir que algo en él me irrita. No se trata solo de sus miles de millones de seguidores, ni de sus múltiples contratos con editoriales o de la cantidad casi grosera de escritores a los que ha entrevistado, es algo en él. En su estúpida sonrisa engreída o en su aspecto de hipster bohemio ricachón o tal vez sea solo el hecho que parece que todo lo ha tenido fácil en la vida.Libero un gruñido y decido que lo mejor es dejar de lado el celular por un momento. Desde que hablé con Juls, luego de la cena en casa de mis padres, habíamos quedado que era el momento de actuar. Enviar un mensaje directo y pedirle amablemente que me diera una reseña de mi obra por sus canales. Eso me ayudaría a que al menos la gente supiera mi
Margot Debo hacer una pausa para respirar antes de continuar leyendo. Esa no ha sido para nada la imagen profesional que he querido mostrar y lo peor es que a lo largo del mensaje intuyo que las cosas solo van a ponerse peor.(...) hablando de eso, esa es la razón de mi mensaje. He estado observando tu página y canal de Youtube durante algunas semanas y veo que te has tomado el trabajo de leer muchos libros que han salido de plataformas digitales y que si me lo permites decir, no tienen el material para ser publicados. Pero bueno es tu trabajo juzgar, no el mio. La razón de mi mensaje es que me gustaría que leyeras mi historia. Es un libro corto que estoy segura tiene lo que se necesita para llegar a una editorial, con el apoyo indicado. No siendo más me despido.A espera de tu respuesta, Margot Sabath.”Leo dos veces más el mensaje para darme cuenta que en realidad si he sido yo la que lo ha enviado. La cabeza ha empezado a darme vueltas y a medida que lo voy leyendo por tercera