Marena:
Tengo la sensación de estar flotando en el aire, envuelta en una bola de fuego que me quema por dentro.
Eso es lo que causan a mi cuerpo las caricias de Abraxas, el tenebroso no ha dicho palabras vacías, realmente su toque es fuego y sus manos la extensión del mismísimo infierno.
Me siento tan torpe siendo consumida y devorada por este siniestro ser que mi naturaleza inocente brilla con mérito propio.
-Me quedaría toda la vida devorando tus deliciosos labios, pero me temo que si continúo haciéndolo no podré detenerme, consumiré tu inocencia por completo, -me habla ronco aún con su frente pegada a la mía
Su boca dice lo contrario a lo que desea su cuerpo, sus manos no dejan de magrear mis nalgas y puedo sentir como su cuerpo ha reaccionado a mi cercanía.
Lo miro con intensidad porque es que no se le puede mirar de otra manera, luego de que me haya devorado hasta la cordura.
Me baja con delicadeza y sigue rodeando mi cintura, cuando mis pequeños pies tocan el piso dánd