‘‘Debería haber sabido que habrías leído todo lo posible ‘‘dice ella, intentando quitarle importancia a la situación, aunque se le quebra la voz.
Tomo su cabeza entre mis manos y hago que me mire.
"¿Háblame?"
Ella se seca los ojos. ‘‘Probablemente no sea una buena idea. Soy un desastre hormonal y emocional. Lo siento. ‘‘Me da una sonrisa llorosa’‘. Mi período es el único momento en el que me pongo así... bueno, eso y cuando estoy con novios infieles. ‘‘Su respiración se entrecorta, pero creo que se supone que debe ser una risa. Cubre una de mis manos con las suyas’‘. Eres un hombre maravilloso, Collin Williams. ¿Cómo tuve tanta suerte de que quisieras ser el padre de mi hijo?
La mirada en sus ojos me deja atónito. Tanto que quiero mirarla dos veces.
‘‘Recuerda que ahora estamos juntos en esto. Estás atrapado conmigo. Vamos. Dúchate y baja. Traje la cena conmigo ‘‘le digo.
Me levanto. Daisy asiente y sale de la cama.
‘‘Bajaré en un momento ‘‘dice sin mirarme.
La tomo de la mano mientra