Todas las personas que allí se encontraban se giraron hacia ellos luego de escuchar los gritos de Alice, en tanto un silencio sepulcral se instalaba en el lugar.
Luar y Kim quedaron paralizados ante tal escándalo y la reacción de Ethan fue soltar la mano de su padre automáticamente al escuchar la voz de Alice y buscar refugio detrás de su mamá, acción que enfureció a Luar.
– ¡No vuelvas a hablar así de mi hijo! – hablo alzando la voz la omega.
– BASTARDO – grito una vez más Alice – Eso es lo que es, un bastardo, hijo de una perra roba marido – vociferaba la castaña sin importarle el lugar en el que se encontraba, ni el espectáculo que estaba ofreciendo.
– Dije que te calles loca – decía Luar, la omega trataba de controlarse ya que su hijo estaba presente, pero estaba a punto de perder los estribos.
– Quien eres tú para mandarme a callar estúpida facilona – seguía chillando Alice en tanto se acercaba a Luar.
Una vez estuvo frente a ambos los miró con desdén y asco.
– Será mejor que te