Después de ver cómo Amanda se alejaba para siempre de mi vida, sentí que había tocado fondo como nunca antes. Lo que sentía por ella era algo muy fuerte que no podía entender y mucho menos controlar. Luego de mi ausencia repentina de la reunión con Matt, debía volver a la editorial, pero era lo menos que quería hacer. Solo deseaba ir a casa y encerrarme nuevamente en esa oscuridad de la que quizás nunca debí salir.
Llegué a la editorial y Nora estaba ahí nuevamente. Ya no parecía ser la misma que siempre quería jugar o con su picardía. Estaba enojada conmigo y era lo menos que merecía de su parte. Además, tampoco quería estar con ella, pero el espectáculo debía continuar y esta vez fue un gran desafío.
De nuevo inició una supuesta reunión en la cual no estaba presente en mi mente, pero al escuchar la palabra Luxury, volví a tierra.
―¿Qué han dicho?
―¿Estás escuchando o qué? ―añadió Matt muy molesto―. Tienen que ir al Luxury para que los medios de comunicación los vean entrar y se crea