La noche en el “Toscana” no había sido tan difícil como lo esperaba. Sin embargo, ver a Fabián Mistic era algo que no tenía en mis planes; y mucho menos volver a discutir con él. Sin embargo, no podía dejar de pensar en él.
«¿Por qué»
Salí del “Toscana” junto a Valentín e ignoré el inesperado encuentro con Fabián. De nuevo la limusina pasó por nosotros en el restaurante. Valentí había sido todo un caballero. Pero ahora de nuevo me sentía preocupada y nerviosa.
Quería regresar al Luxury, pero no sabía qué intensiones tenía Valentín. Quizás había cambiado de opinión, pero necesitaba saberlo ahora mismo.
―¿La pasaste bien está noche? ―dijo, Valentín, acercándose a mí, dentro de la limusina.
―Sí, fue una noche agradable ―dije sin olvidar sonreír.
―Ma alegró―Sonrió de vuelta y colocó su mano sobre mi rodilla―. Eres hermosa, Amanda―Su mano pasó de la rodilla a mi muslo y sentí una corriente eléctrica acompañada de un sutil escalofrío. Me observó sin parpadear, se ubicó más cerca de y vi en