Alonzo estacionó su auto en el hotel donde se estaba quedando Fiorella. Se bajó del auto y miró a su alrededor, buscando cualquier señal de que alguien lo estuviera observando. No vio nada sospechoso, así que se dirigió hacia la entrada del hotel.
Debía sacarle unas cuantas verdades a Fiorella, y ese sería el lugar perfecto.
Mientras caminaba, vio a Vittorio Rossi salir en un auto. Alonzo se detuvo y lo miró, preguntándose qué estaría haciendo allí, bueno no era que no supiera que eran hermanos, era más que obvio que Fiorella estaba aliada con Vittorio y se había acercado a Dante solo por Vittorio.
Después de un momento, Vitorio se alejó en su auto, y Alonzo se dirigió hacia la habitación de Fiorella.
Llegó a la puerta de la habitación y tocó suavemente.
—Adelante —escuchó la voz de Fiorella desde el otro lado de la puerta.
Alonzo entró en la habitación y buscó a Fiorella con la mirada. La encontró saliendo del baño, envuelta en una bata transparente que dejaba poco a la imaginació