Los dos nos observamos fijamente y si hay algo que debo resaltar es que no hay ninguna intención de causar daño, sus ojos me dicen que me ama y quiere que esto funcione. Así que, como la tonta mujer enamorada dejó a un lado todas mis inseguridades, sospechas y miedo para escucharlo de manera imparcial.
— ¿Qué es lo que tienes por contarme? — pregunto intentando tener toda la fortaleza mental para enfrentarme a lo que él me va a confesar.— Como dijo Amelia, cuando la estábamos torturando… las mujeres que tuve antes de ti y se obsesionaron conmigo se aliaron con esa desquiciada mujer para hacerme caer.— Espera un momento, ¿cómo es posible que hasta ahora te des cuenta de eso? — pregunto confundida.Maximiliano es un hombre que sabe hacer bien su trabajo y si hay algo que debo mencionar sobre en que es bueno, es en anticiparse a los movimientos de su enemigo.