- ¿Y ahora que vamos a hacer? - pregunté abrazándome a mí misma al sentir que la temperatura dentro de la fábrica iba bajando lentamente acorde iba anocheciendo- ¿Quedarnos en este frío y sucio lugar hasta morirnos congelados? Mientras hablaba mi aliento salía en forma de humo blanco.
Él encendió un cigarrillo, sin inmutarse por mis reclamos y estiró las piernas en el suelo, empujando los restos de suciedad lejos de él.
- ¿Quieres uno? - estiró la caja de cigarrillos hacia mí.
-No gracias- negué rotundamente y con asco. Nunca en mi vida había tocado un cigarrillo, de tan solo sentir el olor rancio me hacía recordar a mi madre fumando en todos los rincones de la casa- Quiero que me digas si este es tu plan o si no tienes un plan- me froté el brazo para darme calor.
- ¿Plan? - se rio soltando el humo del cigarrillo hacia el techo- mi único plan era que volvieras conmigo Carlita y que seamos una familia otra vez.
No pude evitar reírme por eso.
- ¿Realmente creíste que eso pasaría? - me b