Si bien lo recuerdo, en cada Navidad papá nos contaba de su vida; según el venía de un linaje de ricos que generación tras generación fueron pasando la herencia, mencionaba que los herederos de todo el imperio creado por ellos eran los primogénitos, y papá era hijo único de aquel primogénito, desde pequeño mi abuelo enseño a papá el negocio familiar: la fabricación de telas finas, mi abuelo lo llevaba siempre con él a las fábricas, a las reuniones para que fuera aprendiendo como se manejaba todo.

En todo caso la herencia llegó a mi padre cuando tenía 16 años pues sus padres y sus abuelos habían muerto en un accidente aéreo, o eso fue lo que le dijeron a él, después de aquello aconsejado por Andrew un anciano de confianza de su padre y además tutor de mi padre; con su ayuda llegó administrar todos los bienes de manera correcta, hasta que cumplió los 18 años, como ya era mayor de edad, todo lo que un día fue de su padre, paso a ser de él, trabajo tanto que logró acumular mucho dinero; a los 20 años ya era millonario y había fundado con otros empresarios esa famosa empresa "LINEUX" la que quedó en banca rota; a esa edad también conoció a mamá y un año después se casaron; mandaron a construir una lujosa casa en el mejor barrio de la ciudad y formaron una familia con 6 integrantes.

Desperté a las 5:30a.m. me levante, cepille los dientes, me cambie y baje hacia la cocina a preparar el desayuno; aunque no sabía cosinar del todo, prepare huevos revueltos y chocolate caliente; salí de la casa a las 6:30, tome el autobús y baje en la plaza que daba frente a la UniversidadUniversidad; me senté en una de las bancas y abri mi cuaderno con mis apintes, pues a las 9:00a.m. daría mi examen y como ahora tenía que hacer muchas cosas, no tenía tiempo de estudiar casí.

Eran las 8:30a.m. seguía estudiando para mi examen, cuando un anciano se sienta al lado mio y empieza hablar.

— Estudiando mucho— Me dice sonriendo amablemente, lo mire y le respondi ya que no quice ser descortés porque me estaba interrumpiendo.

— ¡Sí! hoy tengo examen.

— ¡Oh! pues espero que te vaya bien — Habló mientras solo me limité a sonreír — Sabes te ví llegar muy temprano aquí — Añadió.

— ¿Ah sí? Cuestioné.

— ¡Sí! Afirmo — Toma lo necesitas — Estiró su mano y me dio un cafe, estaba en duda si aceptarlo o no, pero el sonrió de nuevo y no tuve más remedio que aceptar.

— ¡Gracias! Dije y él se marchó deseandome suerte; de pronto recibo una llamada de mamá, estaba muy nerviosa, no entendía que trataba de decirme, tartamudeaba mucho; así que decidí ir a casa a ver qué pasaba mientras cuestionaba del ¿Por qué mi madre no había ido a trabajar? Tome el autobús sin importarme el examen y después de 30 minutos llegue a casa, entre rápidamente y allí estaba mi madre y hermanos, menos el pequeño Ryan, esto parecía más como una reunión ya que todo este tiempo que había transcurrido no habíamos estado juntos nisiquiera para las comidas diarias, al verme entrando a la sala ella me pidio que tomara asiento, la mire desconfiada ya que lucia muy triste además tenía los ojos rojos, había estado llorando, respiró ondo y luego comenzó a hablar con la voz algo quebrada.

_Hijos, saben que a su padre todos sus amigos le dieron la espalda, cuando más los necesitó, le cerraron la puerta en la cara, nadie lo quiso contratar, y como saben tuvo que conformarse en conseguir cualquier empleo; lo que lo llevó lejos de nosotros. Entonces ella no se contuvo y empezó a sollozar.

_ ¿Qué está pasando mamá? a que viene todo esto ahora — Le pregunte un poco preocupada al igual que mis hermanos.

_Hijos, su pa...tartamudeaba mucho, su padre acaba de fallecer en la plantación de cebada. Al oír eso, todos quedamos en shock, intentaba asimilar aquellas palabras que menciono mi madre, no podía creer lo que estaba pasando; mi padre está muerto, ¿Cómo paso? Las preguntas invadían mi mente y la tristeza invadía mi corazón, las lágrimas brotaban de mis ojos, sentía un gran dolor en el pecho y no era la única que tenía esos sentimientos, todos estábamos tan consternados por aquel fatal incidente que había sucedido; mire a mi alrededor Anderson abrazaba a Diana y a mamá que lloraban en su pecho. Salí del trance por un momento y pregunté a mamá sollozando.

— ¿Qué fue lo que pasó? si padre nunca tuvo alguna enfermedad. Ella se separó de Anderson, se limpió las lágrimas y volvió a respirar ondo antes de hablar.

— Me llamaron los encargados del lugar, sucede que dos trabajadores discutían entre sí por la comida hasta que uno de ellos saco una navaja y empezó a amenazar al otro, tu padre que se encontraba allí intento apaciguar su enojo pero, en ese momento los hombres empezaron a pelear, pero él en intento de separarlos lo apuñalo accidentalmente justo en el corazón y murió al instante.

— Y ahora mamá ¿Qué pasará con el cuerpo de papá? Pregunté.

— Ya llame a la funeraria para hacer todos los arreglos, el cuerpo de tu padre llegará en unas horas. Los propietarios de los campos pagaran todo los costos de la funeraria y mandaran el dinero que tu padre ganó trabajando aunque no es mucho nos ayudará un poco — Mencionó.

Y ahí estaba yo mirando a mi padre muy de cerca, descansaba en su ataúd, con el mejor traje que tenía, su cara estaba pálida y marchita; podía reflejar esas horas de trabajo en las plantaciones, su cansancio, su preocupación, su dedicación por su familia durante estos años. Se me venían tantos recuerdos a la mente, cuando me compró mi primera bicicleta, o aquella vez que me regalo un reloj de oro, también una de las navidades en que me dió un hermoso collar de diamante junto a unos aretes muy costosos, o ese viaje a Nueva Caledonia en las vacaciones, donde me enseño a nadar.

Solo nosotros estábamos presente en el funeral excepto Ryan lo dejamos en la casa de la vecina, luego le explicaríamos que no volvería a ver a papá nunca más, las lágrimas brotaban de nuestros ojos, viendo a la máxima autoridad de la casa, dormir para siempre.