Mundo ficciónIniciar sesiónLa noche había caído sobre el distrito industrial cuando Iván Petrov llegó al almacén abandonado en las afueras de la ciudad. Tres vehículos negros lo escoltaban, sus ocupantes armados hasta los dientes, tensión radiando de cada uno de ellos. Este no era territorio neutral. Era tierra de nadie, el único lugar donde tres familias enemigas podían reunirse sin declarar guerra abierta.
Iván salió del auto, ajustándose los puños de su camisa con movimientos calculados. A su alrededor, el paisaje industrial se extendía como un cementerio de progreso abandonado: estructuras oxidadas, ventanas rotas, el olor a aceite rancio y decadencia. Perfecto para lo que tenía planeado.
Dentro del almacén, tres figuras esperaban alrededor de una mesa improvisada hecha de cajas de madera. Iván las estudió cuidadosamente mientras se acercaba: Dmitri Volkov, el t







