145. El peso de la verdad
El peso de la verdad la aplastaba desde que los fragmentos de memoria habían vuelto durante la transformación.
—Recuperé mi memoria —confesó en un susurro—. Toda, incluso aunque... mi progenitora trató de confundirme.
"Esa hembra no se merece ser llamada madre." Pensó Lana aún llena de dolor e ira.
Zoe abrió los ojos pero no interrumpió, se lo había sospechado al ver el cambio en ella.
Se preguntaba si el Alfa también lo había notado.
—Durante la pelea, cuando sentí a los cachorros en peligro... fue como si algo se rompiera dentro de mí. Recuerdo mi antigua manada, el rechazo de ellos, como huí embarazada de aquí...
Se quedó callada abruptamente porque lo que más le dolía aunque no iba a admitirlo en voz alta era ver a Eryx con Nina, Zoe lo entendió y palideció porque recordaba lo que pasó después esa noche después de que ayudara a Lana a escapar de la manada con sus cachorros en el vientre.
Zoe apretó sus manos con más fuerza, su timidez momentáneamente olvidada por la preocupación.