Cap. 83: Yo cree ese perfil.
Todos estallaron en risas, menos Jessy, que empezó a cruzarse de brazos y patear el suelo.
—Te aseguro que Mara va a preferir ser mi amiga cuando yo traiga a mis robots —expresó con suficiencia.
Teo frunció el ceño, apretó los labios.
—Mara será mi novia cuando seamos grandes.
Mara abrió sus ojos de golpe y se llevó la manita a la boca sorprendida, parpadeó un par de veces y reaccionó.
—¡Ya basta los tres!
Se hizo silencio.
—Pero yo no pienso casarme ni tener hijos cuando sea grande. Puedo ser amiga de los tres sin que se peleen por mí.
Jessy la miró, desconcertado. Teo bajó la cabeza. Armando le aplaudió como si hubiese ganado un debate presidencial.
—Bueno —dijo él—, aclarado eso, propongo que hagamos un experimento para ver cuál de los dos es más torpe: Jessy o el hámster de la sala de biología.
Mateo encendió una luz roja.
—Mi voto es por el hámster. Es más simpático.
Y así, con risas contenidas, pequeñas rivalidades infantiles y mucha energía, la nueva jornada en la academia