Dallas y yo estábamos esperando afuera del baño mientras Amy terminaba su ducha. Por fin había dormido, pero se le notaba en el rostro que no había sido un sueño tranquilo.
—Habló. —Dijo Dallas en voz baja.
Asentí.
—Es un progreso… lento, pero ahí está. —Estaba un poco emocionado de que por fin estuviera hablando, aunque intentaba no ilusionarme demasiado en caso de que retrocediera.
Él sonrió y bajó la mirada, seguramente pensando, lo mismo que yo.
Amy salió vestida con unos leggins negros y una camiseta azul, nos miró a los dos. Suspiró y se acercó, sentándose entre nosotros. Tomó una de cada una de nuestras manos y apoyó la cabeza en mi hombro.
—Quiero salir hoy, tal vez dar un paseo. —Apartó la cabeza de mi hombro y me miró primero a mí, luego a Dallas.
Los dos sonreímos.
—Claro, Aims. —Respondió Dallas, apoyando su cabeza en su hombro.
No podíamos estar más felices, ya que lo máximo que había hecho hasta ahora era caminar hasta un auto. Eso podía ser bueno para ella.
Apenas