Capítulo145. Confesión de Fiona
Fiona continuó diciendo: Parecía que Felipe ya no quería saber nada más de mí. Ya que ni siquiera respondía a mis llamadas. Aquella indiferencia me rompió en mil pedazos. Desesperada y perdida, tomé la peor decisión posible: mezclar alcohol con gasolina. Y aquí estoy... toda aporreada, pagando las consecuencias de mis actos.
Fiona seguía hablando como un lorito, sin detenerse un segundo, completamente ajena al cambio en el semblante de Sofía. Porque en cuanto Sofía se dio cuenta que nuevamente había apuntado a la persona equivocada, su rostro se tensó. Pero lo que realmente la dejó sin aliento fue descubrir que Felipe ya se había enamorado de otra persona.
Su mente se llenó de preguntas, pero había una que no dejaba de martillarle la cabeza: ¿Entonces quién demonios era su esposa?
Ella ahora se encontraba exactamente como al principio: perdida, sin saber por dónde empezar. Pero había algo que ahora ardía dentro de ella como un fuego incontrolable. Tenía un objetivo claro y brutal: des