222. LENGUAJE SECRETO
Todos habían salido del despacho al oír los gritos. El doctor Rossi se acerca a Gabriel.
— Hijo, sé que Evelin puede ser difícil a veces, pero no puedes seguirle la corriente. Debes mantener la calma —le aconseja, preocupado.
— No es lo que parece, señor Rossi —responde Gabriel sonriente.
— Entiendo, pero no debes alterarla ahora, en el último tramo de su embarazo. En este periodo, las mujeres pueden volverse muy nerviosas y asustadizas. Mantén la calma, hijo —insiste el doctor, preocupado por las frecuentes discusiones que escucha.
— Lo hago, mi suegro. Le digo que no es lo que está pensando —le responde Gabriel, y comienza a subir las escaleras lentamente. Aunque su pierna ha mejorado, todavía le cuesta subir escalones.
— Me preocupan esos chicos —comenta Elvira.
— Esperemos que no sea nada serio. Evelin últimamente pasa mucho tiempo gritándole a Gaby. Y él parece que ya perdió la paciencia y le responde del mismo modo. Los escucho a menudo desde mi habitación —expresa Salvatore, pr