—¿Crees que esta vez te saldrás con la tuya?— pregunta Damián enfurecido. Le tiene tantas ganas a Thomas. Llevaba tiempo esperando este momento de tenerlo frente a frente luego de todo el daño que hizo, pero más a Alice.
—¡Hoy te mueres Anderson! Si Alice no es para mí, tampoco para ti. Los odio a los dos— Thomas, ejerciendo fuerza para no dejarse quitar el arma de Damián.
—Para que te muerdas de la rabia, maldito enfermo. Ella y yo somos felices, y esa mujer es mía en este y el otro mundo— le propina un puño en el rostro.
Thomas reaccionó para disparar, aprovechando la pequeña distancia tras ese golpe, pero Damián no le da chance. Vuelve contra Thomas, dispuesto a quitarle el arma. Los enfermeros y pacientes que van pasando por ese pasillo se llenaron de pánico.
Los escoltas de Damián llegaron justamente al lugar y eso fue aterrador para Thomas, quien no quiere perder su oportunidad, pero Damián es fuerte y un hombre lleno de valentía que no se rinde por nada del mundo.
Wilson lo prim