Capítulo 15: Si quieres jugar, jugaremos.
Alexa caminaba por el jardín trasero de la pequeña casa en la que se encontraba, no podía volver con su familia, quienes no sabían nada sobre lo que estaba pasando, ellos por ningún motivo debían enterarse de todo lo que estaba haciendo porque entonces, al final no tendría ningún lugar al cual volver. No podía evitar sentirse nerviosa, esperando noticias. Estaba convencida de que Isabel lograría controlar a Savannah, que lograría, como siempre, imponer su voluntad.
Pero la noticia llegó más rápido de lo que esperaba... y no era en absoluto lo que deseaba escuchar. Una de las empleadas, sin saber que llevaba pólvora en sus palabras, murmuró al pasar:
— La señorita Savannah ya habló con Doña Isabel.
— ¿Qué dijiste? — Alexa se giró con rapidez, los ojos entrecerrados.
— Que ya hablaron... y, bueno... — La joven bajó la voz—, parece que Doña Isabel no logró convencerla de nada. La señorita Savannah dijo que no piensa irse. Que se quedará con el señor Santiago... para siempre.
El mundo de