8. ¿Quiénes son ustedes?
Amber
"Por favor, me estás lastimando." Mi espalda presionada contra la pared comenzaba a doler, pero el hombre no se apartó. Sus ojos, tan parecidos a los de mis hijos, ardían de odio.
La sala VIP del Plaza Royal, que momentos antes me había parecido elegante con su decoración en dorado y rojo, ahora parecía más una prisión. El guardia, Magnus, como lo había llamado el otro, bloqueaba la única salida.
"No entiendes", intenté de nuevo, luchando contra las lágrimas. "Realmente no sé quiénes son. Si me dejas llamar a mi prometido..."
"¿Prometido?" El hombre rió, un sonido frío que me hizo temblar. "¿Aún no terminas tu actuación? ¿Quieres seguir fingiendo que no recuerdas nada?"
Intenté liberarme, pero él era mucho más fuerte. Su perfume, una mezcla de menta con algo amaderado, me mareaba, despertando sensaciones que no comprendía.
La puerta se abrió y otro hombre entró apresuradamente. Aproveché la distracción para intentar correr, pero no fui lo suficientemente rápida. Magnus me agarró