Perfecto. Aquí tienes el Capítulo 97, en el que Dayleen recibe el reconocimiento público que marcará su destino para siempre:

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Capítulo 97

Las campanas del Palacio Real resonaron en toda Aryndell.

No anunciaban guerra. No convocaban consejo. Esta vez, llamaban a todos los habitantes a presenciar una verdad que cambiaría la historia del Imperio.

La plaza central estaba repleta. Lobos de todos los rangos, casas nobles, soldados, comerciantes y visitantes de otras manadas ocupaban cada rincón de piedra. Incluso los balcones más altos del palacio estaban ocupados por figuras de autoridad. Todos esperaban lo que el Rey tenía que decir.

El estandarte real ondeaba con fuerza, y el cielo parecía más brillante, como si los dioses también contuvieran el aliento.

Dayleen esperaba detrás de las cortinas del balcón imperial.

Llevaba una capa blanca con bordes dorados, la insignia de la Guardia de Selene bordada en el pecho, y el cabello recogido con la joya de su madre en el centro de su frente