-Buenas tardes.
Saludó Germán, muy incómodo porque su novia escuchó con claridad las palabras de Alejandro.
El médico estaba saliendo con su novia, porque había terminado su turno, cuando le sonó un bip, indicando que se tenían que comunicar con Leonardo, por eso se dirigió a la habitación de Alejandra, suponiendo que su amigo estaría allí.
Le dijo a Viviana que lo esperara en el pasillo, pero ella entró detrás de él.
Alejandro giró la cabeza y al ver a Viviana, no pudo justificar, sus palabras.
La cara de Viviana se clavó en la mujer que yacía en la cama de la clínica.
-Buenas tardes Alejandro.
Le dijo al amante de su amiga.
-Hola Viviana.
Saludó incómodo.
-Alejandro, el bip no deja de sonar, tenés una emergencia.
-Lo sé, gracias por avisarme.
-Perdón, no quise interrumpir.
Dijo con incomodidad el médico.
-No interrumpiste nada, ya me iba.
-Alejandro… no te vayas.
Le rogó la mujer que yacía en la cama de la clínica.
El médico y su novia salieron de la habitación, Viviana sin querer d