Alejandro, que muchas veces pensó en cortar la relación con su novia, porque no era lo que buscaba en su vida y no quería dejar pasar el tiempo, para que ella no se hiciera ilusiones a futuro, no encontraba la forma de hacerlo.
-No puedo cortar la relación en este momento, ella está enferma y se apoya mucho en mí.
Le confesó a su amigo.
-No es justo para vos.
-Tampoco para ella, luego de aquella noche, ni siquiera volví a estar con otra mujer.
Se refería a la mujer con la que estuvo en su despedida de soltero y su amigo lo sabía.
- ¿Y con ella?
- ¿Con ella?
- ¿Estás con ella?
Germán fue directo, es que veía mal a su amigo y Alejandra no era parte de la misión, si por cualquier razón, tuvieran que volver a su dimensión, ni siquiera le podría explicar a ella por qué se tendría que alejar.
-Alguna que otra vez, Alejandra está muy mal anímicamente y la estoy apoyando.
-Te desconozco.
Germán estaba asombrado.
- ¿La amás?
Preguntó con cautela.
-No… pero le tengo cariño y respeto, es la mejo