Había amanecido desnuda enredada en mis sábanas mientras la claridad se colaba en por el ventanal frente a la cama.
Observo a un costado y me encuentro completamente sola, no era la primera vez que sucedía y es que llevaba semanas amaneciendo con Damian a mi lado. Se había vuelto una costumbre que se colara en las noches a mi habitación y se marchara en la madrugada antes que todos despertarán.
Me voy al cuarto de baño tomando una ducha, me visto y arreglo un poco. Hoy es mi día libre así que decido revolotear por toda la hacienda hoy o quizás ir a las cascadas.
Al bajar las escaleras me encuentro a José quien está acompañado de Fara.
—Pensé dormirías hasta tarde hoy —Musita José —. Es tu día libre, deberías descansar para retomar fuerzas.
—Ya me he acostumbrado a levantarme temprano —Le sonrió —. ¿Van alguna parte?
—Iremos a dar un paseo por los alrededores y ver las demás extensiones de la hacienda , ¿Quieres venir?
Pregunta Fara y rápidamente niego con un poco de pena.
—Aún n