Egan
Nuestra relación de suegro versus yerno siempre había sido especial. Alexey y yo por años lo tomamos como una fuente de consejeros, éramos sus sobrinos de corazón.
—Sabes que la sigo amando.
—Lo sé, de lo contrario te mandaba a Andrés Camilo a que te parta la nariz de nuevo. —volvimos a sonreír.
—Abuelo, ¿cuándo conoceré a mi papá?
—Cuando despierte, campeón. Lamento que por todo esto retrasaran su almuerzo, pueden ir a cenar.
Afirmé. Nos quedamos callados por un momento y en eso llegaron Samuel y Mapa. Por los exámenes de Perla, nuestro almuerzo se había retrasado.
—Hola a todos, saludos del padre Castro. —La recién llegada saludó de beso a su padre y cargó a su sobrino. Nos conectamos de puñito Sam y yo—. Egan, ¿vas a ir a la reunión de mañana con Eugenia? —Dejó al niño en la silla.
—Eso dependerá de ella. —Los brazos de Mapa me sorprendieron.
—Gracias, te confieso, tuve ganas de matarla por lo que te hizo, pero gracias a Jaime supe quién había sido el vigilante contratado. Cu