Chanel:
Mi teléfono seguía sonando con desespero, joder, quién sea que esté llamando, era un jodido dolor de cabeza, pero lo seguí ignorando, estaba de camino a donde quería ir. ¿Venía sola? ¡Por supuesto que no! A mi lado venía el tonto de Donovan, me hubiese encantado traer a Jared, pero sería estúpido de mi parte traerlo aquí de nuevo, y de igual manera, él debía quedarse resguardando mis pacientes especiales del piso tres.
Me reí bastante al verlo con la boca abierta, muy jefe del FBI, pero estaba aquí a mi lado bien dormido y con la baba casi cayéndosele de la boca.
— Ya estamos por llegar. — lo muevo para que se despierte, pero se resiste. — Donovan… ¡Joder! — se para automáticamente. — Llegamos. — asiente despertándose de inmediato.
El gran hospital, en el cual hice mi residencia, estaba frente a mí nuevamente, incluso él se removió a mi lado, solo había venido un par de veces aquí, pero estar de vuelta y de esta manera, era tan extraño.
Ingresé y estacioné el auto, estaba ansi