Punto de vista de Teresa
Estaba sola junto a una mesa alta, aferrando la copa de champán como si fuera lo único que me mantenía atada a la realidad.
El salón giraba a mi alrededor: risas, conversaciones, tintineo de copas, el roce de telas caras. Todos aquí pertenecían. Todos menos yo.
Di un sorbo al champán sin saborearlo. Mi mente repetía la última hora como una película que no podía parar.
Las manos de Rafael en mi espalda, subiendo la cremallera. Cómo sus dedos se habían quedado, dibujando caminos en mi piel que me hicieron olvidar cómo respirar. El collar… Dios, el collar, pesado y precioso en mi garganta, su roce quemándome mientras lo abrochaba.
La forma en que me había mirado en el espejo. No con odio, ni con asco, ni con la indiferencia fría que solía llevar. Algo completamente distinto. Algo que parecía casi…
No. No podía permitirme pensar así. No podía buscarle sentido a gestos que seguramente no lo tenían.
Pero mi cuerpo sabía la verdad. Recordaba cada roce, cada segundo d