Clara caminó lentamente fuera del almacén, sus pasos resonando en la quietud de la noche. Las palabras de Marcos seguían retumbando en su mente, como una melodía sombría que no podía apartar. "La lealtad será el precio que pagarás por tu libertad". ¿Qué significaba realmente eso? ¿Qué tan lejos estaba dispuesta a llegar para descubrir la verdad sobre su padre, sobre Ignacio, sobre ella misma?

El aire frío la golpeó al salir, pero no la hizo sentir más viva. No podía dejar de pensar en todo lo que había aprendido, en las piezas del rompecabezas que ahora parecía más complicado que nunca. Si todo lo que Marcos decía era cierto, si esta guerra de sombras era tan grande como parecía, ¿podía Clara confiar en alguien? ¿Podía siquiera confiar en sí misma?

Conducir hacia su apartamento le dio tiempo para reflexionar, pero a la vez, cada segundo en el que no tenía respuestas se sentía como un castigo. Sabía que no podía seguir huyendo de las preguntas. Tenía que enfrentarlas, aunque el precio