Capítulo 33. Sanación
Vicky
—Hace una mañana preciosa, deberían de salir a dar una vuelta.
—¿Cariño…?
Una mano bastante familiar se cierra en mi muslo distrayéndome de mis pensamientos y volteo a mi costado para darme cuenta de la mano de Isaac sobre mi pierna. Dejo de revolver la comida en mi plato para prestar atención a las dos mujeres frente a mí, quienes me observan con ese maldito gesto lastimero que ya comienza a fastidiarme.
—Perdón —mascullo de manera distraída—. No escuché lo que dijeron.
—Decía que es un hermoso día —repite Maggie sonriendo cálidamente—. Tal vez podrían salir al pueblo por un helado, o dar una vuelta por el bosque.
Mi mirada se posa en el hombre a mi lado. Isaac no se niega, pero tampoco me presiona para aceptar, lo cual agradezco.
Ha pasado un mes desde lo que pasó y aún no logro recuperar por completo mi estado de ánimo, sin embargo, me esfuerzo, por él, por mi familia; trato de complacerlos en este tipo de cosas, aunque la verdad es que mi mente se mantiene ausente en todo mo