FLASHBACK
—¡Dante! ¡Maldita sea! No se la pudo haber tragado la tierra, ¡NO! —gritó Xavier, furioso, como lo hacía cada día desde que Elizabeth había huido de su auto.
—Señor, hemos revisado todos los registros de la ciudad. Todos los niños de las posibles edades de su hijo han sido investigados, pero no hemos podido ubicar a la señora. Como le dije, creo que ella está muerta.
Xavier escuchó las palabras de Dante resonar en su mente, y con rabia estrelló su copa contra la pared, rozando peligrosamente la cabeza de su hombre.
—¿Muerta? ¿Tienes pruebas de eso? —se acercó, mostrando los dientes como un perro de caza.
Desde que Elizabeth se escapó, le costaba conciliar el sueño. Su estado se había vuelto pésimo; había invertido millones de su fortuna en la búsqueda de la mujer, pero nunca encontró una sola señal de ella. Y eso era lo que realmente lo solevaba. Desde que era un niño, todo lo que pedía era concebido, venía de una gran dinastía de mafiosos, y no aceptaba un no p