POV: Aslin Ventura
Carttal reaccionó como una fiera. En cuanto el guardia terminó de hablar, se le fue encima con furia.
—¡¿Cómo es eso posible?! —rugió, apretando los puños—. ¡¿Cómo demonios permitiste que mis hijos salieran?! ¡¿Cómo los dejaste ir?!
El guardia levantó las manos, temblando.
—Señor, no es mi culpa… la señora me dijo que los niños saldrían con su tía. Yo solo obedecí. ¡Se lo juro, no tengo nada que ver!
Carttal se giró bruscamente hacia mí. Sus ojos… nunca los había visto así. Parecían los de una bestia salvaje a punto de atacar.
—¡Fuera de aquí! —gritó con una voz que retumbó en toda la habitación.
El guardia salió corriendo, sin atreverse a mirar atrás.
Entonces me miró a mí. Pero no era el mismo hombre que había amado… no en ese instante. Ese Carttal me veía con odio, con rabia, con algo que me rompió por dentro.
—¿Cómo pudiste, Aslin? —espetó, avanzando hacia mí—. ¡¿Cómo carajos te atreves a poner la vida de nuestros hijos en peligro?! ¡¿Qué clase de madre eres?!
S