Capítulo 32 —Llegan refuerzos
Narrador:
La mañana en la Fundación comenzó con un ritmo más acelerado que de costumbre. Había movimiento desde temprano, con personal de mantenimiento acomodando equipos, médicos reunidos en pequeñas discusiones improvisadas, y asistentes corriendo con carpetas de un lado a otro.
Desirée cruzó el hall principal acompañada de Margot, ambas vestidas con sobriedad y paso decidido. Saludaban con la cabeza a quienes se cruzaban, sin detenerse. Desirée ya había aprendido a moverse por ese lugar como si nunca se hubiera ido. Como si cada rincón no escondiera una historia. Como si no sintiera el peso del apellido en cada placa de la pared.
Justo cuando pasaban frente al área de coordinación, la puerta del ascensor se abrió y Cédric salió, con el teléfono en una mano y unos documentos en la otra. Se detuvo al verla, y por un segundo, el entorno desapareció.
—Hola, Desireé —dijo él, con una leve sonrisa.
—Hola —respondió ella, bajando un poco la vista, pero sin pe