(Desde la perspectiva de Sheis)

Sí, las cosas no serían tan divertidas si yo mismo no me complicará la vida, más aún de lo revuelta que de por sí ya se encuentra por la cantidad de problemas que me persiguen y que yo mismo también provoco.

La verdad y lo tengo que admitir poner uno de mis famosos juegos de seducción en marcha ante aquella para mí resultó ser tan fácil, algo por lo que temo se me ha de alabar y que no es la primera vez que hago por lo mismo no me pude resistir a tocarla pero realmente yo no contaba con su reacción.

Aysun no solo se resistió al encanto lobuno sino que también se atrevió a medir fuerzas conmigo y vaya que era sin dudas la primera que lo hacía en mis casi cuarenta años y que gracias a mi genética no aparento, sino que de igual manera se atrevió a colocar leyes de por medio.

Pero, aún yo sabiendo lo que podía suceder porque las cartas siempre se inclinan hacia donde más les convienen en la mal llamada balanza del destino, yo acepte y selle todo como yo lo c