Cap. 22: No se ve muy interesado en eso...
En ese momento, una figura conocida se acercó a la mesa. Lucía, con su aire amistoso y segura de sí misma, se detuvo junto a ellos. Stella se tensó de inmediato, pero trató de mantener una expresión neutra.
—Stella, Marco… ¡Qué sorpresa verlos aquí! —exclamó Lucía en un tono cálido, lanzando una rápida mirada a Marco, quien permanecía impasible, observándola.
—Hola, Lucía —respondió Stella, con una leve rigidez en su voz—. No esperaba encontrarte por aquí.
Lucía sonrió, lanzando una mirada más fija hacia Marco y adoptando un tono conciliador.
—He querido verte para disculparme por lo que sucedió hace unas semanas. Fue inapropiado y… algunas de nosotras nos arrepentimos sinceramente, pero no nos atrevimos a buscarlos —dijo, dirigiendo sus palabras especialmente a él.
Stella intentó mantener la compostura.
—Ya no tiene importancia —respondió, sin apartar los ojos de Lucía, aunque notaba el sutil coqueteo que dirigía a Marco, quien, viendo la oportunidad de obtener alguna información, de