Cap. 106: El amor no tiene edad.
Cap. 24: No vuelvas a huir.
Verónica se detuvo en seco, cerrando los ojos por un momento antes de girarse hacia él.
—No es eso —murmuró, pero su voz carecía de convicción.
Alexander frunció el ceño, dando un paso hacia ella.
—Entonces explícamelo. Porque cada vez que estamos en el mismo lugar, haces todo lo posible por evitarme. ¿Tan insoportable soy para ti?
—No es eso —repitió Verónica, esta vez con más fuerza. Sus manos temblaban ligeramente mientras intentaba mantener la compostura—. Es que tú… eres un hombre comprometido.
Alexander ladeó la cabeza, la confusión reflejada en sus ojos.
—¿Comprometido? ¿Con quién? —preguntó, en tono incrédulo.
Verónica apretó los labios, apartando la mirada mientras el calor subía a sus mejillas.
—Fui a buscarte a tu casa hace unos días —dijo finalmente—. Y te vi… con esa mujer. Ella estaba con Emily, y ustedes parecían… parecían una familia.
Alexander la miró fijamente, y por un momento, no dijo nada. Luego, sin previo aviso, dio un paso adelante y