Capítulo 20
Camila llegó a casa al final de la tarde, aún con el corazón acelerado despues de ver a Santiago descontrolado, nunca había visto esa faceta en el.
Al entrar, se sorprendió al ver la mesa puesta y a Luciano organizando los cubiertos con una sonrisa, el tenía un delantal blanco en la cintura.
—¿Qué es esto? —preguntó ella con una ceja levantada sorprendida por la elegancia de todo.
—Una cena especial —respondió él con voz suave, la tomo de la mano y la llevo hasta la mesa quitándole el abrigo
Pedrito corrió hacia ella y la abrazó con fuerza, con esa sonrisa cálida de un niño tierno
—¡Camilaaaa! Cociné para ti con papá Luciano —dijo con orgullo y saltando contento.
Camila lo alzó y sonrió, aunque se sentía rara porque en su casa nunca tuvo un recibimiento cálido como este, ella solo era un fantasma para su hermana y papá, La escena era bonita, cálida, no quería perder esto, lo que había logrado con Luciano era lo que más deseaba.
Laura apareció por las escaleras, sonriente