Capítulo 23
Camila llegó al hospital con el corazón apunto de salir del pecho, a pesar de su pésima relación que en teoría no eran hermanas, Camila aún quería a Adriana, y se preocupó con la llamada, Luciano la acompañaba, sabía que era incómodo, pero no iba a dejarla sola.
Apenas entraron, vieron a Santiago caminando por el pasillo muy ansioso, Al verla con él, su expresión cambio y se acercó con el rostro rojo por la rabia.
—¿Qué hace este tipo aquí? —dijo Santiago con rabia, señalando a Luciano.
Camila no titubeó, se acercó y se mantuvo firme
—Es mi esposo —respondió seria enseñando su anillo de bodas —. Si él no puede estar aquí, yo tampoco.
La frase fue una daga que lastimó el ego de Santiago que bajó la mirada, dolido.
Luciano no dijo nada, tenía que ser sabio, Mantuvo la calma. No iba a armar una escena, no en ese lugar, no en ese momento.
Rodolfo apareció al fondo del pasillo. Tenía el rostro tenso, un par de ojeras marcadas y la corbata mal puesta. Se acercó a Camila con la