Por Alice
Comenzamos los preparativos para la boda.
Eran mucho lo que había que hacer.
El vestido de novia lo hizo un modisto que me refirió mi suegra.
A mi madre le regalé yo el vestido, se lo hizo a medida el mismo modisto.
Con Eli fue otro tema.
Ella tenía que destacarse de alguna manera.
-Me gusta este vestido.
Dijo mostrándome una foto de sugestivo vestido dorado… francés.
-Te pueden hacer uno similar.
-No, quiero ese.
-Eli, no sé cuánto tarda el envío.
-Voy a averiguar.
Mi hermana me miró cabizbaja.
-No va a llegar a tiempo.
-Elegí algo lógico.
Asintió, aunque no estaba convencida.
Mas tarde lo comenté con Alberto y él le dijo a su secretaria que se ocupara del tema.
La empresa que contratamos para la boda se ocupaba de cada detalle.
El salón era el más exclusivo de ciudad.
Decidimos hacerlo en Buenos Aires y no en Mendoza, ya que prácticamente Alberto estaba instalado acá.
Mi novio dejó que yo elija hasta el último de los detalles, yo no soy pretenciosa y contaba con un presupu