Después de una lucha entre padre e hijo, Arnold lo carga y él camina con su hijo en brazos después de una tregua. Así que, yo disfruto de la maravillosa vista mientras fuegos artificiales se escuchan explotar en el suelo.
‘Esta es la parte no violenta y placentera de ser la esposa del jefe de la mafia y madre del príncipe de la mafia.’ Me digo mentalmente. El sueño amenaza con hacerme daño, después de todo, son las cuatro de la mañana y aún no he dormido. — No te duermas, por favor, tenemos algo pendiente que hacer. — dice Arnold sonriéndome. — Pero, estoy agotada. — Ya la escuchaste, Niall. Duérmete para que tus padres puedan disfrutar un poco. — dice Arnold caminando más rápido, pero, mi hijo parece disfrutar del techo porque le habla a este. — No creo que se duerma por ahora. — Tenme fe, por favor. — pide Arnold. Pero, los minutos pasan y mi hijo aunque no esta llorando, sigue divertido viendo el techo, la barba de su padre o simplemente el