Cassy
Llegamos a la habitación, cruzamos la puerta en la misma postura y me lanza de espaldas encima de la cama. Doy un grito por la sorpresa de caer a la cama. Nos reímos y seguimos besándonos. Sin dejar de morderme el cuello, con gran pericia logró desabrochar mi blusa, exponiendo mi sujetador negro. Lo miro directamente a la cara, y los dos asomamos una media sonrisa maléfica, retadora. A ver cómo harás para quitármelo pensaba yo.
Que tonta, es un hombre sencillo y no se complica la vida. Metió sus manos por debajo de mi sujetador, agarró mis dos senos como si la vida le fuera en ello y con un suave movimiento elevó mi sujetador por encima del pecho. Su boca devora mis aureolas sin compasión, succiona, chupa y yo creo que me muero del placer solo con eso.
Su cuerpo queda medio recostado a mi lado y mientras se esmera en darme placer en mi boca y senos, noto como me intentan quitar el pantalón, tirando de él hacia mis rodillas. Se trata de Ángela, me los quita y se tumba a mi otro l