Narra William.
Me despido de todos y salgo de la casa, Sam me sigue hasta el carro, entro y bajo el vidrio, ella me mira apoyándose en la puerta.
— Gracias por venir — niego.
— No tienes por qué… ¿tu madre ha cambiado de parecer? — la morena niega.
— Intento, pero sigue en negación, Alex ha intentado también, es un proceso algo complicado, ya el lunes tengo que llevarla a la clínica para un chequeo a ver qué tan avanzado va el cáncer — explica mirando a otro lado como si su mente no estuviera presente como lo hice yo hace unas horas.
— Te lo vuelvo a repetir, no estás sola, Sam — me mira y sonríe.
— Lo sé, William… bueno, ten cuidado por el camino — asiento y se va, arranco, suena una música y noto que es mi nuevo teléfono, contesto viendo el nombre y lo pongo en