Capítulo 9: Perdiendo todo por una noche de pasión.
Vania y Roberto entran al departamento, pero Alina les cae encima sin dejar ni siquiera que den un paso.
—¡Mateo vino a buscarte aquí!
—Lo sé —dice la chica, caminando al sofá y sentándose con el pesar en el rostro. Su amiga se sienta a su lado para abrazarla.
—Te lo encontraste —Vania asiente a esa afirmación y Alina mira a Roberto—. ¿Te dio algo malo? Se nota que lloraste, nena.
—Vino para seguir mintiendo…
—Quiso decirle que está casado, pero que se está divorciando y no sé qué otras cosas más. No sé cómo conoció a Vania, pero no lo quiero cerca de ella otra vez, es uno de esos cavernícolas tóxicos.
—Nena, ¿qué le respondiste cuando te dijo del divorcio?
—Que no le creo, no puedo creerle. Ya me mintió una vez, ¿quién me dice que no está haciendo lo mismo para tenerme de su puerquita? No, Alina, a Mateo De Santis no le creo una palabra más.
—Vania, es que sí es verdad —la chica levanta la mirada y Alina le pasa su iPad con una noticia en la sección de empresarios—. Aquí dice que las