Desde el momento en que la vio, él de inmediato pensó que ella era una mujer hermosa, con sus brillantes ojos oscuros rodeados por largas y espesas pestañas, sus rosados labios gruesos y carnosos, sus redondeadas mejillas sonrojadas.
Las facciones de Nicole estaban dotadas de gracia y belleza natural.
Y aunque se conocieron de una forma única y muy particular, de alguna manera, Patrick se sintió instantáneamente atraído hacia ella.
Quizás por la interesante propuesta que Nicole le hizo al confundirlo con un gigoló o tal vez por la timidez e inocencia con la que ella le habló.
Él todavía no estaba seguro de que lo motivó a aceptar, quizás fue solo para ayudarla o quizás también fue porque vio en Nicole la tristeza y decepción que el mismo sentía, pero no pudo negarse.
Y Patrick no se arrepentía de la decisión que había tomado, pues este viaje y esta actuación como gigoló y como novio falso, se había convertido en un camino de autodescubrimiento.
Patrick había estado con muchas mu