El escucharla enfureció a John de tal modo, que se movió hacia ella con rapidez para tomarla por el cabello con brusquedad. La sujeto con tanta fuerza mientras hacía que levantara el rostro hacia él, que la lastimo.
—No tienes el valor suficiente como para enfrentarme o el poder para hacerlo. Mejor olvida esta tontería, que ambos sabemos que no te atreverás a intentar nada en mi contra —le aseguro, aunque por un momento más bien pareció que intentaba convencerse a si mismo de eso.
—Era de ese modo antes, pero ahora las cosas han cambiado y usted lo ha hecho posible —afirmo.
—Ahora soy Condesa. La Condesa de Essex —le recordó, viéndolo fijamente a los ojos.
—Como tal tengo el poder para hacer eso y más —le garantizo.
Al escucharla, John comenzó a reír por un breve momento