20. algo que debería estar enterrado
“Ethan Hayes”
“Demasiado tarde, Ethan Reed Hayes.” La frase resuena en mi mente apenas escucho la voz de James llamando nuestros nombres.
Pero, si soy honesto conmigo mismo, ya era demasiado tarde desde el momento en que decidí ignorar mi razón y seguí a Mia hasta el jardín.
Desde el instante en que levanté la mano para tocar su rostro y casi cometí la estupidez de besarla.
Mi cerebro trabaja a toda velocidad para darle una apariencia normal a esta situación absurda.
Agradezco mentalmente que Mia sea mucho más baja que yo; lo único que puedo hacer es mirar al frente y actuar con la mayor naturalidad posible.
—Date la vuelta —murmuro, escuchando los pasos de James cada vez más cerca.
Mia me mira, confundida, pero hace lo que le digo, dando un paso adelante y quedándose de espaldas a mí, con los ojos fijos en la vista de la ciudad.
—Aquella es la noria del Navy Pier —señalo un punto lejano en el horizonte, hablando lo bastante alto para que suene natural.
—¿Qué estás…?
—Solo finge, jode