Capítulo 8

La mansión estaba en completo silencio cuando Emily terminó de empacar lo poco que decidió llevar consigo. Había pasado las últimas horas encerrada en su habitación, inmóvil, sintiendo cómo el peso de la humillación y el dolor la aplastaban. Pero ahora, bajo el manto de la noche, con solo la luz de la luna colándose por las ventanas, supo que no podía quedarse más tiempo.

El aire nocturno se colaba por las rendijas de la ventana, helado y cortante, pero ella lo respiraba profundamente como si intentara llenarse de valentía. Cada rincón de la mansión que alguna vez había llamado hogar se sentía ahora como una jaula. Brendan y Alina, los ancianos, los miembros de la manada… todos habían sido partícipes, cómplices, de su caída.

Su mirada recorrió por última vez la habitación. Era más grande que cualquier espacio en el que hubiera vivido antes de convertirse en la Luna de la manada. En cada esquina había detalles que alguna vez la hicieron feliz: los cuadros que Brendan le había regalado
Continue lendo este livro gratuitamente
Digitalize o código para baixar o App
capítulo anteriorpróximo capítulo
Explore e leia boas novelas gratuitamente
Acesso gratuito a um vasto número de boas novelas no aplicativo BueNovela. Baixe os livros que você gosta e leia em qualquer lugar e a qualquer hora.
Leia livros gratuitamente no aplicativo
Digitalize o código para ler no App