17. Jamás imagine esto.
Viktor
Observo con atención los planos del avance de las casas hogar, los comedores y la pequeña clínica que será construida para atender a huérfanos y niños de la calle, especialmente aquellos que están enfermos o que necesitan atención médica. Este proyecto, financiado con el generoso donativo del señor Lorenzo Bianchi, será de gran beneficio no solo para los pequeños que necesitan un hogar, sino también para los miembros del Parlamento. No digo que los únicos beneficiados serán los niños; evidentemente, este trabajo impactará positivamente en toda la comunidad.
Entrego los planos al arquitecto, quien me los recibe con una sonrisa antes de salir del despacho. Sonrío levemente y suspiro. Realmente me gusta hacer este tipo de cosas. Me hace sentir útil, humano.
Últimamente he estado pensando en pasar los fines de semana en las casas hogar, atendiendo personalmente. Incluso deseo llevar a Kamila para que les pueda dar clases a los pequeños. Tal vez así ella se sienta más libre, más tra