~Isabella~
Los días pasan y aún no aparece. Temo que cuando lo haga sea demasiado tarde. En vista de la demora, hemos decidido hacer lo posible para que esa chica y sus hijas estén sanas y salvas.
He ido a casa de Nana y me ha dado la peor noticia que podían darme en estos momentos: dice que Alessandra se ha negado a comer y que ha decidido morir por su bien y el de las niñas. Dylan fue a verla para anunciarle su nuevo destino, que él injustamente le ha impuesto.
La Nana pidió a una de las mucamas cambiar de turno, y esta mañana ha sido ella quien ha servido el desayuno a Alessandra. Justo cuando Dylan entró, la oyó decir lo siguiente, asustando a Alessandra:
—Has de prepararte con el vestido blanco que te obsequié anoche. Mis brujos están terminando de preparar el hechizo que les pedí; con él suplantaré tus recuerdos, eliminando a Matías. Yo ocuparé su lugar en ellos —dijo Dylan, indiferente.
—No puedes hacer algo así, es mezquino. Además, hagas lo que hagas, ni tras mil vida