Capítulo 116. La Gemela Rota.
POV: Mila
El sótano olía a humedad y miedo, un lugar donde la luz apenas llegaba, atrapada entre sombras y hormigón. Bajé los escalones detrás de Nicolás, cada paso resonando como un latido en mi pecho. Víctor iba a mi lado, su rostro tenso, los ojos grises cargados de una esperanza que yo no compartía. Quería ver a Lola, mi gemela, la sombra que me había traicionado, pero cada fibra de mi ser gritaba que esto no traería paz. Nicolás abrió la puerta de acero al final de la escalera, revelando una celda improvisada: paredes desnudas, un catre, y Lola, encadenada a una silla, su rostro pálido y demacrado bajo la luz de una bombilla solitaria.
Lola levantó la cabeza cuando entramos, sus ojos idénticos a los míos, pero llenos de un veneno que nunca había visto. Su cabello, una vez tan parecido al mío, estaba duro, su cuerpo magullado por la tortura de Nicolás. Pero no había arrepentimiento en su mirada, solo una furia fría que me atravesó. "Mila", siseó, su voz rasposa, como si cada palab